jueves, 9 de mayo de 2024

Misión 8. Oído Cocina: ¡Una con sabor a Neuro!

 

    La cultura humana y la historia de la cocina comienzan con la “domesticación del fuego”. El dominio del fuego fue un paso de gigante en la evolución humana. Las hogueras permitían luchar contra el frío, evitar el ataque de fieros animales salvajes y, sobre todo, cocinar los alimentos. Pasar la comida por las brasas no solo eliminaba la mayoría de parásitos y enfermedades de la carne cruda o tóxicos de los vegetales, si no que también permitió reducir el consumo de energía necesaria para hacer la pesada digestión. Ese control de las llamas ocurrió, además, decenas de miles de años antes de lo que se creía. Así lo afirma un equipo de investigadores de Israel en un artículo publicado en la revista Nature Ecology & EvolutionDavid Ruiz Marull.
Pintura Hugo Darnaut, 1885
¿Y si el origen del cerebro humano está en la cocina?
    Antes de cocinar tenemos que comprar y  recordar que a veces menos es más. A la hora de comprar no me dejo engañar por el tamaño, sino por la esencia del producto.
    En el pasillo Neuroeducativo del Supermercado me encuentro con la neurocientífica brasileña Suzane Herculano-Houzel, que me aconseja que me fije en las características del producto si quiero obtener una cocina de calidad. Y me he encontrado:
 “El cerebro humano es el cerebro de un gran primate. Me fijo en las calorías y la cantidad de energía que necesita y he visto que el  cerebro humano como el de otros utiliza la misma cantidad: 6 calorías por cada 1000 millones de neuronas por día. Utiliza tanta energía porque tiene gran cantidad de neuronas. Somos primates con muchas más neuronas para nuestro tamaño que cualquier otro animal. Si los primates son más grandes que nosotros, ¿Por qué no tienen un cerebro más grande que el nuestro y con más neuronas? Porque ellos no disponen de la energía para un cuerpo tan grande y para una gran cantidad de neuronas.
Como las neuronas son tan costosas , el tamaño del cuerpo y la cantidad de neuronas se compensan entre sí. Un primate que come 8 horas por día puede disponer como máximo de 53.000 millones de neuronas. Nosotros disponemos de 86.000 millones de neuronas.

    Sigo recorriendo el pasillo  y me encuentro que “Humanos con nuestras 86.000 millones de neuronas con 70 a 76 kilos de masa corporal, tendríamos que dedicarle más de 9 horas a comer diariamente, lo cual no es posible. Si nuestro cerebro consume tanta energía y si no podemos dedicar tanto tiempo a alimentarnos, la alternativa es obtener de alguna manera más energía de los mismos alimentos. Y eso se cree que coincide con lo que nuestros ancestros inventaron hace un millón de años atrás, cuando inventaron el cocinar.
Tengo ya lo que necesito…Me voy al altar de la evolución: Mi cocina.
     Cocinar es utilizar el fuego para predigerir los alimentos fuera del cuerpo. Los alimentos cocidos son más suaves por lo que son más fáciles  de masticar y de transformarlos en papilla en la boca  de modo que permiten que se digieran por completo y que se absorban en el estómago lo que les hace producir mucha más energía en mucho menos tiempo. Cocinar nos libera tiempo para hacer muchas cosas interesantes con nuestro día y con nuestras neuronas. Esto explica porque el cerebro humano creció hasta hacerse tan grande  rápidamente en la evolución. (Suzane Herculano-Houzel). ¡Pero cuídado con la comida rápida…y también con la alternativa de comer alimentos crudos, ya sabes que te puedes quedar sin neuronas...!

    Para cocinar necesitamos unos ingredientes naturales que nos permita mejorar el funcionamiento de nuestor cereebro

Lo que una vez fue una solución  ahora se convirtió en un problema (obesidad) e irónicamente ahora encontamos la solución en alimentos crudos.

 ¿Cuál es la ventaja humana? ¿Qué poseemos que ningún animal posee?Mayor número de neuronas en la corteza cerebral , explicación de nuestras habilidades cognitivas extraordinarias y esto se debe a que COCINAMOS

Restaurante Neuroeducativo.Oído cocina: ¡Sopa de cerebro!

       - Buenas tardes ¿Ya ha leído la carta? ¿Qué van a tomar?

        - ¿Qué nos recomienda?

        -  El plato del día es Sopa de ...

        - ¿Sopa de Caracol con un poco de música y humor que entra mejor?

      - Aquí solo servimos Sopa de Cerebro al estilo Suzana con el fraccionador isotrópico, que trata químicamente al cerebro hasta convertirlo en una “sopa de cerebro” permite que los núcleos de las células se mantengan  intactos, se remueve la sopa para que todo el líquido sea homogéneo, se toma un poco de ese caldo y se cuenta cuántas células hay. Como ahora la mezcla es homogénea y además existen formas de distinguir los núcleos de las neuronas y células gliales, esta técnica permite contar con precisión la cantidad de células existentes. Los resultados son unos de los más importantes de la neurociencia del siglo XXI. Suzana  Herculano-Houzel, cuyo campo principal de trabajo es neuroatonomía comparada, sus hallazgos incluyen un método para contar neuronas en los cerebros humanos, descubriendo que el cerebro humano tiene 86.000 millones de neuronas, y no 100.000 millones como se creía. Y que por cada neurona el cerebro tiene aproximadamente una célula glial.. Y una neurona puede llegar a conectarse con 10.000. 

-¿Y qué  nutrientes cognitivos me ofrece?

-Los cerebros humanos son gigantescos, siete veces más grandes de lo que tendrían que ser por el tamaño de nuestro cuerpo, utilizan el 25% de toda la energía que requiere el cuerpo cada día, y crecieron enormemente en un período de tiempo evolutivamente muy breve, lo que hizo posible que dejásemos rezagados a nuestros primos hermanos, los grandes simios. O sea, que el cerebro humano es especial, ¿no? Pues no, según Suzana Herculano-Houzel. Los humanos hemos desarrollado unas habilidades cognitivas que superan a los de otros animales, pero no porque seamos un caso aparte desde el punto de vista evolutivo. El cerebro humano nunca ha dejado de ser un cerebro de primate. Si no somos una excepción a las reglas de la evolución, ¿cuál es la fuente de la ventaja humana? Herculano-Houzel muestra que lo importante no es el tamaño del cerebro, sino el hecho de que tengamos más neuronas en el córtex cerebral que ningún otro animal gracias al invento que hicieron nuestros ancestros hace 1,5 millones de años de una forma más eficiente de obtener calorías: cocinar los alimentos. Porque somos primates, ingerir más calorías en menos tiempo hizo posible la rápida adquisición de un número enorme de neuronas en el córtex, la parte del cerebro responsable de identificar patrones, razonar, desarrollar tecnologías y transmitirlas por medio de la cultura. 'La ventaja humana' es una original interpretación de cómo llegamos a ser extraordinarios sin ser evolutivamente especiales.

Imagen Bourrichon
- ¡Qué importante es dudar y analizarlo todo de forma crítica!. Gracias al interés y pasión de  Suzana por conocer el  número de neuronas del cerebro humano para poder compararlo con otras especies e identificar cuantas neuronas se pierden en enfermedades neurodegenerativas. Volveré para seguir aprendiendo. Gracias por el servicio ¿Acepta propina?
SABOR A NEURO 
 Comunidad Neuroeducativa de la Cátedra de Neuroeducación de la Universidad de Barcelona.